Es considerado el mayor oasis de Túnez. Se encuentra a escasos kilómetros de la frontera con Argelia junto a Chott el Djerid y posee una vasta extensión de palmeras que producen el exquisito dátil “Deglet Nour”, desde donde se exporta al resto del mundo. Esta población fue un lugar floreciente en el siglo XIV, convertido en punto inicial y final de las caravanas que atravesaban el Sáhara. Uno de sus encantos radica en la Medina, su ciudad antigua, con sus calles laberínticas.