Su nombre proviene de las palabras Collaguas y Cabanas, dos etnias que habitaban a lo largo del río Colca. Este cañón tiene una profundidad de 4.160 metros y es el cuarto cañón más profundo del planeta. En 2019, la UNESCO lo declaró geoparque mundial junto con los volcanes de Andagua. Es uno de los mayores destinos turísticos de Perú. Además de su riqueza agrícola, se le suma una gran cantidad de iglesias, muchas de ellas de notable arquitectura y valiosas piezas de arte religioso; sus costumbres y tradiciones que muestra en la artesanía de cada uno de sus pueblos. En las cuevas del valle del Colca se encuentran pinturas y grabados con más de 7.000 años de antigüedad representando escenas de caza, guanacos, llamas, zorros, figuras humanas, representaciones astrales como el Sol, la Cruz del Sur, aves y muchas otras figuras, que prueban el paso de los varios asentamientos humanos, durante miles de años que dejaron huellas de su existencia. Es uno de los principales atractivos turísticos del país. Otra de las principales características del valle son sus aguas termales y géiseres, esto indica la presencia de focos volcánicos calientes cercanos.