Capital del país, está ubicada en el centro este de la isla de Honshu. Es actualmente la ciudad más poblada del mundo con una población de unos 37 millones de habitantes. Es el centro de la política, economía, educación, comunicación y cultura del país. Cuenta también con la mayor concentración de sedes corporativas, instituciones financieras, universidades, colegios, museos, teatros, establecimientos comerciales y de entretenimiento de todo Japón. El centro de Tokio, con una población cercana a los 13,23 millones de habitantes, es lo que se conoce internacionalmente como la ciudad de Tokio. En 2015 fue elegida la ciudad más segura del mundo por el periódico The Economist. Fue sede de los Juegos Olímpicos de 1964 y 2020. Es típico ver en la ciudad detalles de la vibrante moda de Harajuku, restaurantes de robots, maid cafés y apasionados superfans conocidos como otakus. Tiene 234 restaurantes con estrellas Michelín, más que ninguna otra ciudad. La ciudad ofrece numerosas galerías de arte y museos de primer nivel, opciones de vida nocturna asombrosamente diversas y tecnología de vanguardia.Lugares que no debes perderte:- Palacio Imperial y jardines exteriores: Erigido sobre el antiguo emplazamiento del castillo Edo (que en su día fue el más grande del mundo), se trasladó a Tokio en 1868. Escondidas detrás de fosos y gruesos muros de piedra, la residencia y las oficinas del Emperador ocupan un sitio privilegiado en el centro de la ciudad. Junto al palacio, se encuentran los jardines exteriores (Jardín Nacional Kokyo Gaien), lugar con más de 2.000 pinos negros con troncos nudosos podados de manera ejemplar y con arquitectura natural muy original, la imponente estatua del guerrero Kusunoki Masashige (samurái del siglo XIV conocido por su lealtad), vistas al famoso puente Nijubashi, fuentes y una cascada que se construyeron en el lugar para la celebración de bodas.- Templo Sensoji: Levantado en el año 628 d.C., se ha reconstruido casi 20 veces a lo largo de la historia. El recinto está compuesto por: una sala principal situada en el centro del recinto donde se encuentra Kannon (la diosa budista de la misericordia), que según cuenta la leyenda, unos pescadores encontraron una estatua suya en el río Sumida y el templo se construyó para venerarla, una pagoda de 5 pisos de altura, la gran linterna roja de la Puerta del Trueno Kaminarimon, con 700 kilógramos de peso teniendo a ambos lados las estatuas de Fujin y Raijin y una calle principal Nakamise-dori de 250 metros de longitud, repleta de tiendas de recuerdos únicos y aperitivos tradicionales.- Torre de Tokio: Es una torre de telecomunicaciones y observación situada en la zona del parque Shiba. Fue construida en 1958 y está inspirada en la torre Eiffel. Posee una altura de 333 metros (segunda estructura más alta de Japón). Está pintada en colores rojos y blancos para cumplir con las regulaciones de seguridad aérea. Sus principales fuentes de ingresos son el turismo y el alquiler de la antena. Más de 150 millones de personas han visitado la torre desde su inauguración. Un edificio de cuatro plantas situado justo debajo de la torre, llamado FootTown, alberga museos, restaurantes y tiendas. Desde allí, los visitantes también pueden acceder a los dos miradores: el mirador principal Main Deck tiene dos plantas y se encuentra a 150 metros de altura; y el Top Deck, más pequeño, que se encuentra a 249,6 metros de altura.- Museo Ghibli: Es el mayor exponente del anime japonés, un estudio de animación que se hizo famoso gracias a sus excelentes trabajos como por ejemplo El viaje de Chihiro, Mi vecino Totoro o El castillo en el cielo. Está dedicado justamente a todo lo relacionado con lo creado por dicha empresa. Abrió sus puertas en el 2001, y desde entonces ha maravillado a sus visitantes con los frutos de la imaginación y creatividad de Hayao Miyazaki. Considerado uno de los mejores lugares para visitar en Tokio. Cuenta con varias exposiciones permanentes, donde se muestran distintos tipos de animación usados en sus películas, así como los medios para realizarlas. El Cine Saturno es uno de los puntos más divertidos de la visita, en él se proyectan cortos realizados por Hayao Miyazaki, al ritmo de uno diferente cada mes. Antes de salir se recomienda visitar la tienda Mamma Aiuto. Dentro, se encuentran un sinfín de productos inspirados en las animaciones que fascinan a todos sus visitantes.- Santuario Meiji: Es un santuario sintoísta dedicado al emperador Meiji y a su esposa la emperatriz Shoken. Fue el primer emperador de Japón en su época moderna y de su mano, Japón pasó de la época feudal al mundo moderno, desde 1868 hasta su muerte. Tiene una extensión de 700.000 metros cuadrados y a su alrededor tiene un bosque formado por más de 120.000 árboles. Está dividido de dos formas: el Naien, parte interior donde se encuentran los edificios de este y el Homotsuden, museo dedicado al Tesoro, en cuyo interior se exponen distintas obras de arte y piezas pertenecientes al emperador y la emperatriz, y el Gaien, parte exterior donde se puede ver una galería de murales con diferentes pasajes de la vida del emperador. Aquí también se encuentran recintos deportivos como el estadio de béisbol Jingu, un recinto de golf o el Gimnasio Nacional de Yoyogi.- Estación de Tren de Tokio: Inspirada en la estación central de Ámsterdam. Su impresionante fachada de ladrillos rojos y blancos, obra arquitectónica característica de principios del siglo XX, oculta en su interior elegantes trenes bala y una gran cantidad de tiendas de cultura pop y fascinantes locales culinarios. El edificio sufrió daños durante la Segunda Guerra Mundial, pero fue restaurado gracias a una importante obra de renovación finalizada en 2012. Uno de los elementos más destacados son los elegantes techos de inspiración neobarroco, situados bajo las grandes cúpulas y caracterizados por sus cálidos tonos amarillos y sus inusuales y sensacionales diseños de águilas e imágenes zodiacales.- Cruce de Shibuya: Es conocido principalmente por ser el más transitado del mundo. Alrededor de 1 millón de personas pasan diariamente por este famoso cruce a una media de 3.000 peatones durante los 47 segundos que permanece abierto. Cruzarlo percibiendo a su vez los anuncios publicitarios o ver pasar la marabunta humana por él, es toda una experiencia y un reclamo para quien visita Tokio.